Una odisea olfativa: de la alta costura a la perfumería
La historia de Façonnable es una historia encantadora que comienza en 1950 en el joyero de la Costa Azul. Jean Goldberg, un visionario de la moda, puso la primera piedra de una casa de modas que pronto vestiría a iconos del cine como Tony Curtis y Cary Grant. Bajo la dirección de Albert Goldberg, el taller familiar se transformó en una marca de prêt-à-porter de lujo sinónimo de elegancia informal.
En 1994, Façonnable hizo su gran entrada en el mundo de las fragancias. Esta incursión marcó el comienzo de una nueva era, la de una línea de fragancias que encarnaría la esencia misma del refinamiento mediterráneo. Maestros perfumistas de renombre como Gérard Anthony y Nathalie Lorson plasmaron el alma de la Riviera en sus frascos, combinando notas frescas y soleadas para evocar los idílicos paisajes del Mediterráneo.
A lo largo de las décadas, Façonnable ha seguido innovando, ofreciendo al mundo creaciones olfativas que han seducido a los conocedores más exigentes. Hoy en día, las fragancias Façonnable son joyas de la perfumería de lujo, célebres por su sofisticación atemporal y su elegancia por excelencia.