Chabaud Maison De Parfum

La evolución de una visión olfativa

En 2002, en la histórica ciudad de Montpellier, la familia Chabaud dio vida a su pasión fundando Chabaud Maison de Parfum. Es el comienzo de una aventura olfativa excepcional, arraigada en la tradición de la perfumería francesa e innovadora al mismo tiempo.

Desde el principio, la casa se ha distinguido por sus creaciones evocadoras, que captan la esencia del sur de Francia. La línea "Lait", lanzada poco después, se convirtió rápidamente en emblemática de la marca, ofreciendo una interpretación única de dulzura y sensualidad.

A lo largo de los años, Chabaud ha ampliado su paleta olfativa, explorando nuevos territorios olfativos. Perfumes como "Lait de Biscuit" y "Lait Concentré" se añadieron a la colección, cada uno contando una historia olfativa única.

La reputación de Chabaud se extiende poco a poco más allá de las fronteras francesas, conquistando a los amantes de los perfumes nicho de todo el mundo. Cada nueva creación refuerza la reputación de la empresa, que combina la artesanía tradicional con la creatividad de vanguardia.

En la actualidad, Chabaud Maison de Parfum sigue escribiendo su historia, manteniéndose fiel a su visión de una perfumería excepcional que trasciende el tiempo y despierta los sentidos.

Excelencia reconocida

Desde su creación en 2002, Chabaud Maison de Parfum se ha consolidado como una figura destacada de la perfumería nicho. Su punto culminante llegó en 2013, en la prestigiosa feria Esxence de Milán, donde la empresa presentó su nueva línea de eaux de parfum. Esto marcó un punto de inflexión decisivo, propulsando a Chabaud al escenario internacional de la alta perfumería.

El reconocimiento de la marca se refleja en su presencia en las boutiques más selectas de todo el mundo. De París a Moscú, pasando por Sydney y Berlín, las creaciones de Chabaud seducen a una clientela exigente en busca de experiencias olfativas únicas.

El compromiso de Chabaud con la excelencia se refleja en todos los aspectos de su producción. Los frascos, verdaderas obras de arte, se fabrican con vidrio tradicional de Normandía. Las velas perfumadas, por su parte, son fruto de una artesanía provenzal centenaria.

La firma de la visionaria diseñadora Sophie Chabaud garantiza la autenticidad y la calidad excepcional de cada creación. Esta búsqueda incesante de la perfección le ha valido la admiración de críticos y entendidos, convirtiendo a Chabaud en una referencia indiscutible en el mundo de las fragancias de lujo.