La Esencia de una Estrella, el Nacimiento de una Marca
La casa Elizabeth Taylor encarna la esencia misma de la sofisticación estadounidense, fusionando el carisma de Hollywood con el arte de la perfumería francesa. Esta alquimia única refleja la personalidad luminosa de su inspiradora, un ícono del séptimo arte reconocido por su encanto magnético y su elegancia atemporal.
Nacida de una visión audaz, la marca vio la luz en 1987 con el lanzamiento de Passion, fruto de una estrecha colaboración entre Elizabeth Taylor y reconocidos perfumistas. Cada creación subsiguiente es testimonio de la incesante búsqueda de perfección que animaba a la actriz, combinando romance, sensualidad y refinamiento.
Los perfumes Elizabeth Taylor se distinguen por su capacidad para capturar la esencia multifacética de su creadora. White Diamonds, joya de la colección lanzada en 1991, ilustra perfectamente esta alquimia, con sus notas florales que evocan los jardines exuberantes y el brillo de los diamantes que tanto fascinaban a la actriz.
El compromiso con la excelencia y la autenticidad está en el corazón de cada frasco. Más que un simple perfume, cada fragancia Elizabeth Taylor es una experiencia sensorial, una invitación a sumergirse en un mundo de sueño y glamour.
Hoy en día, la casa perpetúa el legado de su fundadora, ofreciendo creaciones que combinan armoniosamente tradición e innovación, para el mayor placer de los amantes de los perfumes excepcionales.